Para empezar, si llegas el miércoles por la noche, tendrás la tentación de celebrar un encuentro con algunos viejos amigos, en el Bock'n'roll, por ejemplo.
¡Pero no fuerces la máquina, sería una pena comenzar el festival hecho polvo!
¡Pero no fuerces la máquina, sería una pena comenzar el festival hecho polvo!
¡Reserva tu alojamiento con antelación! Los hoteles normalmente se llenan, ¡y dormir bien es clave para un buen festival!
Por la mañana, necesitarás un café ... Para encontrar el lugar perfecto, vete a la rue des Arceaux, muy cerca de la place des Halles, y entra al Café des Arceaux. Una vez hayas repuesto fuerzas en la terraza, entra dentro para disfrutar de la exposición.
A mediodía habrás abierto el apetito. Cómete una Super Big Burger en Carpe Diem. ¡Sus patatas fritas son para morirse!
¿Por qué no pedir para llevar? Podrás comer mientras admiras las vistas desde las murallas.
Aprovecha los jueves y viernes para conocer a los autores y editores.
Si, al caer la noche, quieres comer algo "gourmand", el famoso camembert fundido del Bruleau Charentais será perfecto.
Pero si la idea es alimentarte a base de picoteo, no hay problema, puedes asistir a la recepción de la Maison des Auteurs. ¡La ocasión ideal para conocer a los jóvenes talentos!
¡Es hora de ponernos serios! Nos vamos al Spin Off para una noche loca entre fanzines underground y música alternativa.
¡No te vayas a dormir muy tarde, solo es el primer día!
Daniel Selig estudió Bellas Artes en Angulema. Es co-fundador de Les Machines, un colectivo de autoedición, junto con otros diez autores, donde publicó su primer libro, Le Héron.
Sus dos últimas publicaciones son Unkungfu, de ediciones Flblb, y Pour mon roi, en ediciones Les Machines.