Nos pusimos en situación nada más entrar: el ascensor que te lleva al principio del recorrido parece un submarino. Los niños estaban encantados. Y cuando llegamos a la primera sala, dedicada al Atlántico, comenzamos a disfrutar con la visión y nos dejamos llevar.
Estuvimos 3 horas porque además de observar los estanques, nos referimos a los numerosos paneles explicativos junto a los acuarios para aprender sobre las costumbres de sus ocupantes. Aprendimos cosas muy divertidas y sorprendentes sobre la vida de los 12.000 animales marinos que lo habitan.
Para evitar esperas en la caja, se recomienda comprar su boleto con sello de tiempo en línea en el sitio web del Aquarium La Rochelle.
Científicos de Plymouth han demostrado la buena influencia que los acuarios ejercen sobre nuestra salud: 10 minutos observando los peces son suficientes para bajar nuestra presión arterial y nuestro ritmo cardíaco y ver nadar un gran número de ejemplares mejora nuestro humor.
Es fácil entenderlo cuando nos abandonamos a la contemplación de la fauna y la flora de las profundidades, que a veces se mecen con las olas y otras ondulan ligeramente en la calma y el silencio. Desconectamos y nos maravillamos.
¿Qué especies citar entre todas estas maravillosas criaturas? Los peces payaso y los cirujanos de los dibujos animados de Disney, los caballitos de mar tan delicados con sus alitas, los tiburones toro dan un poco de miedo, y también el ballet de medusas de puntos blancos que casi nos reconcilian con estas inquietantes criaturas.
¿Cuáles son nuestras salas preferidas? El anfiteatro de los tiburones es impresionante, el invernadero tropical donde podemos por fin ver qué aspecto tiene la famosa piraña, la galería de las luces y los fenómenos extraordinarios de bioluminiscencia, pasar por los túneles de cristal donde nos sentimos como peces en el agua.
De los resplandecientes sardinas hasta el rodaballo que se oculta en los fondos arenosos, o la tortuga que parece volar en el agua y las pequeñas anguilas de jardín, tan divertidas de observar, nos encanta todo y pasamos una estupenda tarde.
Recuerdo que hablamos de 3 millones de litros de agua marina (uno de los mayores acuarios privados de Europa). Es por tanto un fantástico viaje a tamaño natural por los mares y océanos de nuestro planeta azul.
Una visita para ampliar o comenzar, en el sitio web del Acuario de La Rochelle con su enciclopedia de especies para aprender más sobre los diferentes animales marinos presentados a lo largo del curso.